La esencia del bistró con savoir faire
Son las ocho y media de la tarde. Por fin viernes: bienvenido, weekend.
Tengo una reserva en Restaurante Antúnez, la esencia del bistró con savoir faire.
Cita de niñas, bendito encuentro, para enseñarles mi nuevo descubrimiento de la ciudad condal. Salíamos de trabajar la semana pasada y lo descubrimos con mi compi de fatigas, Marc, de afterwork y fue un amor a primera vista.
Un touché a lo grande. Por su emplazamiento. Y por su esquina. Porque luce con sus grandes ventanales y sus cálidas lucecitas.
Por su rollo francés y neoyorquino. Por las mesas redondas de mármol. Por el susurro de voces y ese barullo agradable y familiar. Por lo distendido.
Sentada en la barra de un gastrobar, con un Negroni en la mano, me sentía como en casa. Y la vida se disfrutaba a mi alrededor.
Había parejas, amigos e incluso algún solitario. Pero el denominador común era el calorcito. De ese ambiente, con esa música bajita pero envolvente, esas sensaciones.
Supe que tenía que compartirlo con mis amigas y sentarnos juntas alrededor de una de esas mesas. Y dejar que Ángel y su sonrisa nos «cantara» las sugerencias del chef de una carta que cambia dos veces al año.
Me quedé con las ganas de probar el bao de cerdo con salsa agridulce o el canelón de pato y foie, y la flor de coliflor confitada con bechamel. Pero lo grabé a fuego para la próxima vez.
Quiero la tortilla y el pan con tomate, y las croquetas y un matcha colada, y un virgen maría; todo.
La dolce vita existe en Restaurante Antúnez: «No hay final, no hay principio. Es solo, la infinita pasión de la vida.»
Y si me dan a elegir, me quedo con ella.
Para todos aquellos que quieren disfrutar de esta dolce vita con Antúnez, también ofrecen un servicio del delivery.
Restaurante Antúnez, la esencia del bistró con savoir faire
Carrer de Neptú, 18 • 08006 Barcelona • Tel. +34 93 768 85 75 • www.restauranteantunez.com
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It’s half past eight in the evening. Friday at last: welcome, weekend.
I have a booking at Restaurante Antúnez, the essence of the bistro with savoir faire.
A girl’s get-together, blissful meeting, to show them my new discovery in the city of Barcelona. We were leaving work last week and discovered it with my partner in crime Marc after work, and it was love at first sight.
For its location. On that corner. Because it shines with its large windows and its warm little lights.
For its French and New York vibe. For its round marble tables. For the whisper of voices and that pleasant, familiar hubbub. For the relaxed atmosphere.
Sitting at the bar of a gastro bar, Negroni in hand, I felt at home. And life was being enjoyed all around me.
There were couples, friends and even the odd loner. But the common ground was warmth. From that mood, with that low enveloping music, those feelings.
I knew I had to share it with my friends and sit together around one of those tables. And let Ángel and his smile “sing” us the chef’s suggestions from a menu that changes twice a year.
I was left wanting to try the pork bao with sweet and sour sauce or the duck and foie cannelloni, and the cauliflower flower confit with bechamel. But I’ve burnt it into my mind for next time.
I want the omelette and the bread with tomato and the croquettes and the matcha colada and virgen maría. All of it.
The dolce vita is real in Restaurante Antúnez: “There is no end, there is no beginning. It’s just the infinite passion of life.”
And if given the choice, I’ll take it.
For all those who want to enjoy this dolce vita with Antúnez, they also offer a delivery service.
Restaurante Antúnez, the essence of the bistro with savoir faire.
Carrer de Neptú, 18 • 08006 Barcelona • Phone +34 93 768 85 75 • eng.restauranteantunez.com
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